Principios rotos mencionado en Wonderland

Se viene desarrollando un concurso de microrrelatos en rádio 4 RNE, en el cual todos los martes se elige un ganador. La lista de ellos es magnífica por la calidad de los mismos, Esteban Dublín, Agustín Martínez Valderrama, Rosana Alonso, Gabriel de Biurrun, Alberto Corujo, Rocío Romero, Xavier Blanco, a la que se ha unido Lola Sanabria.

A todos ellos les doy la enhorabuena. Y también al jurado del concurso, por su seriedad, por sus criterios limpios y claros en favor del género (últimamente se dan fallos de concursos con premios generosos recayendo en microrrelatos simplones, con faltas de ortografía y sin pulir).

En esta ocasión, al menos, he estado cerca en Wonderland. Sin que sirva de precedente citaron a los 5 finalistas y mis "Principios rotos" estuvieron ahí.

Para escuchar el fragmento del relato ganador de Lola (minuto 16) y las menciones de los finalistas (minuto 20:30) en el siguiente enlace:
http://media7.rtve.es/resources/TE_SWONDER/mp3/2/4/1322580095442.mp3

Principios rotos

De niño prometí a mi padre que nunca me arrodillaría ante nadie. Que eso es de cobardes. Y los Menéndez, no lo somos.

Doy fe que no lo he hecho en ninguna situación adversa de mi vida. Ni en el colegio cuando el grupo de los mayores me dejó en calzoncillos en el recreo, ni en la mili cuando el primer día los compañeros veteranos me despertaron apuntándome con sus fusiles.

Esto es distinto.

Sin poder contener las lágrimas y con las rodillas clavadas en el suelo de la iglesia, ruego a Dios que no se lo lleve tan pronto.

Paralizado

Las campanadas del reloj de la iglesia indicaron hace un rato que era medianoche. El silencio, desde entonces, se rompe tan sólo por el ulular de una lechuza que viene y va.
De mi boca se desprende un vaho espectral. Hace frío. Una intensa niebla cubre el techo de mi habitación.
Miro al candil de mi mesilla y compruebo que su tenue luz está a punto de apagarse. Debería levantarme de la cama para ir al baño antes. Pero un miedo atroz a poner un pie en el suelo me lo impide. Me ahogo con tan sólo pensarlo.
Y algo se mueve ahí abajo.
Mejor seguiré esperando.

Arma secreta

Es la hora señalada. Mediodía, justo cuando el sol se eleva en la vertical, cuando se disputan todos los duelos.

Por un momento pienso en escapar pero aún no puedo.

Desde la zona central, sin apenas mirarnos a la cara, nos damos la vuelta y nos alejamos al ritmo de la banda sonora de la película de “El bueno, el feo y el malo”. Contamos veinte pasos y esperamos el pistoletazo de salida.

Tan pronto como se escucha, descubro que se aproximan a velocidad vertiginosa decenas de balas de distinto calibre.

Yo todavía no he reaccionado.

Pero no saben que tengo el arma más potente. Soy el protagonista y autor de este microrrelato. No puedo morir.

Punto de Inflexión

Nada más llegar a la casa del pueblo subió al desván. Abrió la puerta con sumo cuidado, aunque no pudo evitar que chirriara un poco y temió ser descubierto. Paralizado en el umbral contuvo la respiración. Y cuando se creyó salvado avanzó dando pasos cortos. Comprobó el tenue halo de luz que siempre atravesaba las persianas y rebuscó entre los trastos viejos almacenados. Herramientas, antigüedades, todas cubiertas de polvo. Del interior de un libro, hoy sí, cayó por casualidad una foto de un bebé en brazos de su madre. En el envés, una nota aclaratoria. Él, llegó de muy lejos.

Y para terminar...

PERSPECTIVAS

Llegó henchido de energía al colegio electoral. Frente a la urna, rebosante de papeletas, encogió los hombros. Y mientras salía, se convirtió en un liliputiense.

DESEO CUMPLIDO

El 20N es también su cumpleaños. Aproxima indeciso su papeleta a la urna. Cierra los ojos soñando un mundo mejor. La deja caer y sopla un viento fresco hacia ella. A la salida, se encuentra numerosos políticos corruptos entregándose voluntariamente a la policía.

JORNADA DE REFLEXIÓN

Hoy tenemos comida familiar y noto una ligera presión sobre mí. Mi padre deja los cubiertos a la izquierda; mi madre, los cambia al derecho. Igual hacen con las copas de vino y con el pan. Y yo, disimuladamente, los coloco en el centro.

DESILUSIÓN

Salió con todas las papeletas posibles. Giró la esquina y se le escapó una. El viento racheado se llevó otra. Perdió más sin darse cuenta. Y cuando se situó frente a la urna, comprobó sus manos vacías. Segundos después, él desapareció cual espejismo en el desierto.

JUEGOS DE AZAR

Pasé toda la jornada del sábado reflexionando. Pensé en echarlo a cara o cruz; luego, a pares o nones. Me sofistiqué con el piedra, papel o tijera. Me compliqué con un bingo. Al final, decidí llamar a los mercados para que eligieran por mí.

¿Casualidad?

EL PAÍS, desde el pasado 4 de noviembre, ha invitado a prestigiosos escritores a participar en un reto: escribir un brevísimo relato inspirado en la política y/o las elecciones que se publicará durante la campaña electoral. Es el mismo desafío que ha propuesto a varios periodistas del diario y que proponen a los lectores. Los textos no podrán superar los 280 caracteres y girarán sobre política y/o elecciones. Un jurado, formado por tres periodistas de EL PAÍS, elegirá a los lectores ganadores del concurso, que se darán a conocer el 20N.

Aunque no lo tenía claro, al ver el listado de escritores que han participado (Millás, Neuman, Iwasaki...) me lancé a enviar alguno, de momento tres nanorrelatos. Uno de ellos es mi última entrada, Circo, donde irónicamente y con perdón del circo, lo comparo con las elecciones.

El caso es que el 7 de noviembre envié otro, "Utopía", y ayer día 10 vi que la escritora-editora Elena Medel había añadido uno, "El voto es secreto" cuya temática guarda bastante semejanza con el mío. No es idéntico pero sí aprecio mucha similitud. Voy a pensar que es casualidad. ¿Será que somos poco originales?

EL CIRCO

Los domadores, que ya hicieron su trabajo, aguardan ahora expectantes desde sus camerinos. Payasos, malabaristas e, incluso, elefantes y panteras, se confunden entre el público. Y en la arena, las jaulas perfectamente dispuestas, brillan inmaculadas.
Cuando la papeleta entró, todos se sintieron parte de una gran familia.
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Otra noche más

Otra noche más, era la frase con la que había que empezar esta semana, para participar en el concurso semanal de microrrelatos del programa Hoy por Hoy de Radio Castellón (Cadena Ser). Y decir que el microrrelato que presenté ha sido leído como finalista, a punto de ganar en palabras de los locutores.

Otra noche más vuelvo a subir a escondidas a la azotea. Me he terminado toda la cena, incluso, he untado con pan la salsa de las albóndigas. La de hoy, es la cuerda más larga que he visto nunca y la quiero lanzar tan lejos, tan lejos, que alcance la estrella donde tú estás mamá.

Para escuchar el micro, ir a escuchar la grabación del programa de viernes 4 de noviembre de Hoy por hoy, alrededor de la hora 22 minutos y 50 segundos. Hacer clic aquí.

O también :

Para leer los ganadores de otras semanas, hacer clic aquí.

Un saludo indio

Demasiadas voces

Como tantas veces había hecho de niño siempre que al anochecer sufro ataques de ansiedad, salgo al jardín. Sólo así consigo calmarme y respirar con tranquilidad. Entonces lo hacía acompañado de algún muñeco en mi mano; hoy lo hago de mi hijo de cinco años.
Mientras contemplamos las estrellas y escuchamos el sonido de los grillos, se abre paso en mi cabeza una voz que me es conocida. Cada vez más intensa, me incita a actuar.
– ¡Hazlo, hazlo, hazlo!
Recuerdo haberle hecho caso en alguna ocasión. En ésta, me abruma otra voz. La voz llorosa de mi hijo.
-¡Papá! ¿Por qué me aprietas el cuello tan fuerte?

Sospechas de infidelidad

Mi mujer me descubrió anoche jugando con el cuello de otra. No se creyó que tan sólo tenía hambre. Ni aún viendo cómo chorreaba la sangre de mi víctima.