Medellín, diciembre 2 de 2009
Este mediodía alrededor de las 13:15 horas, Raúl Gutiérrez, de 17 años, regresaba a casa de haber visitado por la mañana a su abuela cuando se encontró sorpresivamente con su novia, Lucía Pérez. Le aguardaba en el portal y bien de lejos ésta se percató de que su novio presentaba una marca de labios en la mejilla derecha frunciendo el entrecejo y arreándole un sopapo que terminó por dejarle dicha mejilla hecha un cuadro. “¡No entiendo a las mujeres, sin comerlo ni beberlo me llevo semejante bofetón!”, se quejaba Raúl. Horas después el equipo de investigación de A-Pin pudo comprobar que la abuela vivía sola y la ayudaba llevando la compra hasta casa. Ya en las despedidas, además de una suculenta propina numerosos besos eran dados a su nieto y como era una abuela presumida solía pintarse los labios dejándole impresas las marcas arriba indicadas. Informó para A-Pin, No Comments.
* Sopapo: Golpe que se da con la mano en la cara
Este mediodía alrededor de las 13:15 horas, Raúl Gutiérrez, de 17 años, regresaba a casa de haber visitado por la mañana a su abuela cuando se encontró sorpresivamente con su novia, Lucía Pérez. Le aguardaba en el portal y bien de lejos ésta se percató de que su novio presentaba una marca de labios en la mejilla derecha frunciendo el entrecejo y arreándole un sopapo que terminó por dejarle dicha mejilla hecha un cuadro. “¡No entiendo a las mujeres, sin comerlo ni beberlo me llevo semejante bofetón!”, se quejaba Raúl. Horas después el equipo de investigación de A-Pin pudo comprobar que la abuela vivía sola y la ayudaba llevando la compra hasta casa. Ya en las despedidas, además de una suculenta propina numerosos besos eran dados a su nieto y como era una abuela presumida solía pintarse los labios dejándole impresas las marcas arriba indicadas. Informó para A-Pin, No Comments.
* Sopapo: Golpe que se da con la mano en la cara
7 ¿Comments o No Comments?:
Relato diferente a los que acostumbro a añadir para dar a conocer el blog de la Agencia Pinocho y su periódico el A-Pin.
En él se recogen “Relatos de ficción breves con estilo informativo periodístico" o como gusta llamarles de “microficción periodística".
Mientras más cotidiana la historia, mejor. Sólo aquello que jamás interesaría a un diario.
http://agenciapinocho.blogspot.com/
Ja!
Raúl, a partir de este sopapo, entenderá mejor a las mujeres y se limpiará las marcas de rouge de su ropa, no importando quién se la haya dejado.
Buenísimo !!!
Un beso con una sonrisa.
Mi madre. Mi madre no da beso que no deje marca:)
Le advertiré a mi hijo de que se mire al espejo tras cada visita al a abuela. Por si las moscas, digo, las novias:)
Me encantó.
Abrazos
David, con tu permiso, te voy a incluir en mis contactos.
Pero bueno, no sabe la novia lo de la abuela?
Ay eso le pasa por no preguntar!
besicos
Me ha gustado la verdad. Creo que en el fondo yo hubiese reaccionado igual que esa novia. Un abrazo.
Si es que el carmín y la mujer.... no tienen porque llevarse bien, sobre todo cuando una no pertenece a la otra... jajajaj
Saludos y un abrazo!
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