El joven y bisoño mago Merlín ofrece sus trucos en espectáculos por las fiestas de los pueblos. Adivina los naipes que previamente un asistente del público muestra a sus espaldas, es capaz de sacar monedas detrás de las orejas de los niños presentes e incluso se atreve a hacer desaparecer objetos en su chistera que luego aparecen en los bolsillos de los sorprendidos y entregados seguidores. Esto último no siempre le sale a la perfección. En más de una ocasión al regresar a casa comprueba cómo se ha llevado consigo la cartera de algún pobre inocente, el pañuelo de una señora o el reloj de un caballero. Pero lo de anoche resulta más complicado de resolver: ¿cómo contactar con el dueño de unas llaves que dicen abrir las Puertas del Infierno?
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está muy bien hilado. El argumento es bueno, pero creo que le falta tensión, fuerza, pero es un texto muy digno. A mi juicio, es un microrrelato de esos ejemplares que sirven para reflexionar sobre el género. El tema es original, está bien cerrado, el ritmo es bueno y hay conflicto, aunque no sea demasiado fuerte.
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Pues a mí me gusta todo el texto justo hasta lo de las puertas del infierno, porque como lector creo que te estás moviendo en un registro realista (aunque el prota sea un mago) y al final me sacas de ahí y me metes en un registro fantástico que me descoloca, Se podría solucionar dando pistas sobre la persona a la que le hace el truco, para que al final descubramos que era el diablo, se me ocurre. Perdona la chapa.
Me encanta la mezcla de fantasía con realidad!
Bueno, bueno.
Saludos indios como dices tú.
NC, yo pienso exactamente lo mismo que Manu. Sería bueno conocer tus opiniones acerca de nuestros comentarios.
Opiniones nunca faltarán.
Recuerda, simplemente, que estás aquí para disfrutar.
Un abrazo.
Como dijo mi amigo Guillermo Iglesias en "Minificciones" en un comentario que me encantó y que ya lo he repetido por ahí,
"me gustó y mucho" " y "aunque no haya argumentos racionales, mi opinión es inapelable"
A mí me ha gustado mucho. Un final perfecto...aunque las puertas del infierno son tan fáciles de abrir...
Pues más le vale tirarlas en el primer contenedor que se encuentre en el camino.
Me gustó.
Pienso que es muy difícil crear microrelatos y es un género que, particularmente, me gusta y tú lo haces muy bien.
Abrazos
Uyyyy yo las tiraría al río, y negaría absolutamente todo!"!!
Besicos
Siento no contestar a todos los comentarios, no es por dejadez, al contrario me importan mucho, pero el tiempo invertido en ellos prefiero dedicarlo a visitar vuestros blogs y allí sí de vez en cuando comentar sobre vuestros textos.
Tan sólo de vez en cuando, si noto que hay más alboroto o veo conveniente aclarar algo, lo haré.
Respecto a este texto, sí es verdad que mezclo algo de realidad con ficción, pero noto que me siento cómodo haciéndolo así. ¿No es malo no?
Como dice Luis Borrás lo importante es disfrutar (y luego añado yo que aprender)
Bueno, gracias a tod@s por vuestras opiniones
Que espectadores tan intrigantes tenía el mago...
Vaya calidad de público que tenía este mago, mi amigo.
Si yo fuera él, arrojaría las llaves y desecharía encontrar a su dueño...
:)
Abrazo inmenso.
SIL
Viernes y paseando por tus letras... Un placer venir a estar atento a tus cosillas... tu universo...
Saludos y un abrazo.
Como es mago, que las haga desaparecer...
¿Sabe? Me dio una idea para un micro... Podría ser una continuación del suyo, aunque no tiene nada que ver... Espero que no le importe.
Me gustó.
Jau
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