Hace frío y reina una espesa tiniebla. Me despierto tumbado en el suelo duro e inerte de un habitáculo de apenas dos metros cuadrados. Hasta mí llegan lastimeros aullidos. “Hay perros cerca”- pensé. Asustado empecé a gritar y de mi boca alargada, cual hocico, nacieron quejumbrosos ladridos que me hicieron saltar de la cama, exaltado y sudoroso.
10 ¿Comments o No Comments?:
Terrible pesadilla ?
El nacimiento del hombre lobo?
Simplemente el autor se ha puesto en el lugar de un perro desesperado en cautiverio?
En cualquiera de esas tres opciones, atrapante, una vez más.
Un abrazo.
Toma ya.... bueno, convertirse en perro sería un buen sueño, aunque mejor en uno que estuviera sobre una manta al lado de la chimenea, que para todo hay que tener suerte.
Si encima hay fobias para qué queremos mas...
Besicos
Esto sí que es una pesadilla en toda regla...
Abrazos
Hmmmm... Pesadilla que has tenido realmente o uno de tus grandes delirios literarios? Si es así, es buenísmo! :D
Yo creo que prefiero tener hocico y al menos pegar aullidos... que tener boca y no poder gritar con ella, como me pasaba a mí en numerosas pesadillas que tenía de pequeña. Soñaba que no podía gritar cuando me veía en apuros... Era terrible!
Besos Indios.
Coño con el sueño, carajo!
jajajja Depierta hostia!
Saludos y un abrazo.
Es hora de ir a pasear..
Es como si hubiese visto salir un perro de otro perro.
Abrazos.
Ufff... después del nude ese, salgo del relato medio confuso. La idea, buena. Un consejo: cuida los tiempos verbales, no pases de presente a pasado sin una buena justificación.
UIn saludo.
Que bueno que mis cuadros sirvan para ilustrar tus escritos, pero si vas a usarlos, agradecería muchísimo que des los cerditos correspondientes de la imagen y no la alteraras.
saludos.
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